La madre de Sonia, a cenado (purés y cosas por el estilo), así que las cosas van bien.

Cambiando radicalmente de tema, voy a hacer una reflexión.

Vivir soñando es muy doloroso, ya que los mejores sueños los deseos no se cumplen simplemente porque la magia se esconde bien, tanto que yo diría que a mi me hacen falta 3 vidas para verla, sin contar los conciertos de Rosana, que cuando solo disfruto me invade la magia, lo mejor es hacer que a tu necesidad o realidad le brillen los ojos y se adivine en ellos como poco alegría, cuando algo que es necesario se hace esperar mas de 13 años provoca que como ahora este en una especie de letargo en el que mientras espero agradezco lo que se me da…. y me dejo llevar por la inercia. Pero lo malo es que a veces siento que a mi espíritu se está volviendo loco, no le dejo soñar porque sin la dosis los efectos pueden ser dolorosos, la vuelta a la realidad, muchas veces ya que no es motivadora, y al futuro tan necesario, con el que como mínimo espero sonreír esta congelado por miedo al dolor de momento.

UN ABRAZO